¡Cada miércoles recibe nuestras novedades! Suscríbete a nuestro boletín
  • Iniciar sesión
  • Regístrate ahora

Cómo potenciar las ventas de San Valentín sin ofrecer descuentos

Cómo potenciar las ventas de San Valentín sin ofrecer descuentos

Después de la resaca de rebajas, es habitual que nuestras tiendas pasen por un periodo más complicado donde la visita de público disminuye. 

Por este motivo, tenemos que aprovechar todas las oportunidades que se nos presenten para conseguir más clientes y aumentar las ventas.   

La campaña estacional más cercana que tenemos en este momento es San Valentín y nos guste o no, el día de los enamorados tenemos que trabajar para sacar de ella el máximo beneficio posible.


¿Cómo puedo utilizar San Valentín para vender más en mi tienda?

1.Recuerda a tu clientela que San Valentín se acerca

La última semana de enero pon en marcha tu campaña de San Valentín para que la idea vaya calando poco a poco entre tu público. 

Es verdad que los clientes siempre esperan al último momento para hacer sus compras y que con toda seguridad los productos de San Valentín los vendas un par de día antes de la fecha en cuestión. 

Sin embargo, nosotros tenemos que recordar al cliente que este día está cerca para que vaya pensándolo y teniéndolo en consideración.


2.Prepara un argumentario comercial o justificación de la promoción

¿A qué nos referimos con un argumentario comercial?

A una serie de acciones y mensajes que utilizaremos para impactar al cliente y dejar constancia de que la promoción o campaña (en este caso San Valentín) tiene sentido y es importante sumarse a ella. 

Poner un cartel y recordar a los usuarios que tienes productos especiales para San Valentín no es suficiente. Tienes que buscar argumentos que persuadan al cliente, que despierten su emotividad y que le convenzan de que San Valentín puede ser una oportunidad para sorprender a su pareja.


¿Cómo puedes transmitir la emotividad de la promoción?

Enviando mensajes persuasivos y cargados de emoción a través de cartelería/ decoración y de los dependientes de la tienda. 

Lo fundamental es tener claro el mensaje a transmitir. Para esta campaña podría ser: “Lo importante no es el regalo, son las manos que lo entregan”

Y enfocar toda la comunicación de la tienda en esta línea, incluida la cartelería y argumentario de los dependientes.

Cuando un cliente haga una compra, mientras le cobras puedes preguntarle si no celebra San Valentín. En caso de que te diga que no, aprovecha para enviarle tu mensaje: dile que tu tampoco lo celebras y que es una fecha más comercial que romántica pero que lo cierto es que las parejas siempre agradecen un detalle por pequeño que sea. Lo importante de esta fecha no es qué se regala ni el día en que se hace el regalo, lo fundamental es quién nos lo está regalando. 

Apóyate en estos u otros argumentos para impactar a tus clientes. Estos mensajes cargados de emoción y acompañados de recursos gráficos (carteles, flyers…) calarán en la persona y será entonces cuando empiece a plantearse el sentido del día de los enamorados y la posibilidad de comprar algo no por mero consumismo sino para agradar a su pareja.


3.Cuida la imagen de la tienda durante las semanas previas a la campaña

Si apuestas por la campaña de San Valentín, el cliente tiene que percibirlo en cuanto entre por la puerta. Coloca carteles, dedica un rincón o un espacio en tu mostrador a ideas de regalos o ayúdate de la música y el olor para generar ambiente.

Estos elementos harán que el publico conecte con su lado más sensible y que la idea de San Valentín se instale en su cabeza. Antes de que pasaran por la puerta de tu tienda quizá ni se habían acordado de que el día de los enamorados estaba cerca.


4.Ofrece un descuento, una selección de productos o el catálogo completo

Podemos aprovechar la oportunidad que San Valentín nos ofrece de diferentes formas y no siempre tiene que ser mediante un descuento. 

Es decir, puedes incentivar a tus clientes mediante un descuento en una selección de productos o directamente no ofrecer ninguna promoción.

Esto depende de ti y de los márgenes que manejes. Pero independientemente de lo que decidas sobre el precio, lo que sí necesitas como hemos visto en el punto anterior, es un argumentario que justifique las compras del día de San Valentín. En el mensaje que envíes a tus clientes está la clave del éxito.

En el caso de que no ofrezcas ningún descuento, vende la cara de ilusión que pondrá esa marido o esposa cuando reciba el inesperado detalle.

O si no tienes productos especiales para San Valentín, puedes hacer hincapié en que no importa la naturaleza del regalo (ya sea un conjunto lencero o unos leggins térmicos). Insiste en que lo importante es la intención de agradar del que regala y no el regalo en sí mismo.